“Gente que ayer no tenia solución, hoy soluciona su vida con un trasplante”

Tras el fallecimiento de Sandro comenzaron a circular algunas noticias por la web vinculadas a la donación de órganos. Para evacuar todo tipo de mito alrededor del tema “New Play Noticias” habló con Claudio Cruces, representante del Cucaiba de Zona Norte.


La operación que se realizó Sandro en Mendoza, ¿No se hace acá?
Sí, claro que sí. La elección de Sandro de ir a Mendoza fue una elección personal.

A partir de la muerte de Sandro han surgido muchas notas con estadísticas, tales como "el 40% de los trasplantados cardiopulmonares viven 5 años". ¿Cómo puede afectar esto a un trasplantado?
Mucho. Por eso nosotros no trabajamos con esas estadísticas, trabajamos con personas. Hay un mito de que a los 10 años de ser transplantado se tienen que volver a trasplantar, y justamente ayer hablaba con una chica que hace 15 años que es transplantada y tenía miedo. Le dije que no tenía que tener miedo porque los miedos se cumplen.

La operación que se le realizó al cantante donde se le transplantó el corazón y los pulmones es una de las mas complicadas...
Es el transplante mas complicado por varios motivos. Primero porque el corazón y el pulmón tienen que tener exactamente las medidas de la persona que va a ser trasplantada, con el hígado eso no sucede, el hígado se fermenta. En segundo lugar, el pulmón es el que menos resiste fuera del cuerpo, mas de tres o cuatro horas ese órgano no resiste. En tercer lugar, una persona, para hacer un trasplante, tiene que estar en buen estado de salud, aunque parezca irónico.

Ayer, leyendo los diarios me topé con un titular que decía que en el 2020 la donación de órganos iba a ser rutina. ¿Qué opinas?
Ya es rutinaria la donación de órganos, la gente dona. La provincia de Buenos Aires es una de las más solidarias de América Latina. Pero de todos modos, esta afirmación hay que hablarla con un profeta.

Sin embargo, los datos de la realidad van en esa dirección, la de la donación.
Sí, se están donando más órganos. Este año hubo 500 personas que fallecieron pero hubo unas 1.200 personas que se salvaron por recibir su órgano. Las listas de espera no bajan nunca porque gente que ayer no tenia solución hoy soluciona su vida con un trasplante.