“En mis tiempos libres me gusta la soledad porque reflexiono y me tranquilizo”

(Nov. 2008). Cuando sonríe se asoman dos paletas que se apoyan sobre el labio inferior. Por eso Norberto Antelo, concejal por el bloque “Coalición Cívica GEN Ps”, no sonríe.
“En el 95´ me decidí a actuar en política, no quería que siguiera el país en manos de un tipo como Menem, y traté de luchar durante todos estos años para poder cambiar algo”, cuenta.
En sus comienzos se afilió al radicalismo, pero “nos fuimos o nos echaron porque no estábamos de acuerdo con las bases”, asegura.
Antes de asumir la banca de concejal en diciembre del año pasado se había dedicado toda su vida a la construcción, área en la que sigue trabajando.
Parece calmo, su andar también pero hay pequeños signos que pueden transformarse en huellas.
Milita del año 95. “Tengo un montón de experiencias, buenas y malas”…una de cal: “Como se trabaja en las internas, no se respetan muchas cosas”…una de arena: “La alegría de que la gente pueda votar, pueda volcar su gusto en las urnas”.
Tiene el pelo blanco, con un brillo a plata especial.
Conoce a su señora hace 30 años. Con ella tiene dos hijas. El primero de diciembre cumple tres décadas junto a ella: “No es fácil, hay que comprender, quererse”.
No es amante del cine, no lee demasiado. “A mi me gusta estar solo, en mis tiempos libres me gusta la soledad porque reflexiono y me tranquilizo”.
Pero si le gusta viajar, “cundo puedo me escapo cuatro días, una semanita con mi mujer, a algún lugar que me tranquilice”.
Tiene la piel de los dedos comida por un nerviosismos que intenta controlar, sin embargo el dice ser “muy impulsivo”.
Es de libra, pero no se parece a los de su signo, la templanza no es su fuerte.