Misael Mario Fleitas Obes fue condenado, el miércoles, a 20 años de prisión por el crimen de Agustín Ferla (24), un estudiante de ingeniería y padre de un bebé, asesinado en octubre de 2007 durante un asalto en la localidad de Boulogne, San Isidro. Ferla fue ejecutado en la puerta de su casa al resistirse al robo del auto de su familia. La noche del 17 de octubre de 2007, tres asaltantes - dos mujeres y un hombre - intentaron robarle el vehículo a Agustín en Juan de San Martín y 14 de Julio. El fallo se dictó en los Tribunales de San Isidro, ubicado en Ituzaingo al 300.
Tras el fallo, los familiares de Fleitas protagonizaron incidentes en la puerta del edificio de Tribunales de San Isidro, justo en el momento en que pasaba por allí el cortejo que acompañaba los restos del policía Aldo Garrido, asesinado el martes al intentar evitar un asalto.
El camarógrafo del canal de televisión, Publi 5, Leonardo Rosviar sufrió ataques por parte de los familiares por estar cumpliendo su labor, filmando: “Yo estaba en la parte baja de los Tribunales esperando al notero que había entrado a presenciar el juicio, y veo que bajan algunos muchachos y se empiezan a reunir en la vereda de enfrente. Prendo la cámara a la espera de lo que podía suceder”, cuenta.
La acción continuó de la siguiente manera: “Cuando empiezo a grabar, siento un golpe en la nuca, pero la cámara fue la que recibió el mayor impacto y cayó al suelo. Desde la vereda de enfrente me insultaban y amenazaban para que dejara de grabar. La cámara nunca se apagó”.
Además de agredir a Rosviar, los familiares generaron incidentes y destrozos, por lo que hubo varios detenidos.
Tras el fallo, los familiares de Fleitas protagonizaron incidentes en la puerta del edificio de Tribunales de San Isidro, justo en el momento en que pasaba por allí el cortejo que acompañaba los restos del policía Aldo Garrido, asesinado el martes al intentar evitar un asalto.
El camarógrafo del canal de televisión, Publi 5, Leonardo Rosviar sufrió ataques por parte de los familiares por estar cumpliendo su labor, filmando: “Yo estaba en la parte baja de los Tribunales esperando al notero que había entrado a presenciar el juicio, y veo que bajan algunos muchachos y se empiezan a reunir en la vereda de enfrente. Prendo la cámara a la espera de lo que podía suceder”, cuenta.
La acción continuó de la siguiente manera: “Cuando empiezo a grabar, siento un golpe en la nuca, pero la cámara fue la que recibió el mayor impacto y cayó al suelo. Desde la vereda de enfrente me insultaban y amenazaban para que dejara de grabar. La cámara nunca se apagó”.
Además de agredir a Rosviar, los familiares generaron incidentes y destrozos, por lo que hubo varios detenidos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario