Acariciando la duda

(Esta nota corresponde a la editorial del diario impreso de "Las Cosas del Decir" mes de Agosto)
Algunas personas hablan con certezas.
Creo que la certeza deberíamos dejárselas a la ciencia…ni siquiera a la historia.
Se que suena raro… yo soy periodista e intento acercarme lo más posible a la verdad.
Aunque un hecho contado o incluso vivido, creo que siempre estará incompleto: contamos y vivimos desde nosotros mismos, por eso desde cualquier escuela de periodismo nos enseñan a buscar más de una fuente informativa.

Pero volvamos a las certezas. Encontré esta definición: “La certeza es la posesión de una verdad que se corresponde con el conocimiento perfecto. La conciencia de una certeza permite afirmar este conocimiento sin temor de duda”

Eso veo: no se deja lugar a la duda.
Los medios de comunicación salieron a hablar de Graciela Alfano y su supuesto (digo “supuesto” porque me permito el lugar de la duda) romance con Massera. Dijeron que había recibido bienes de desaparecidos. La oración de la duda, en este caso, seria: “ no se sabe aún, esta siendo investigado, el hecho de que Graciela Alfano podría haber recibido bienes de desaparecidos”.

He escuchado a muchas personas decir, con respecto a periodistas que han trabajado en la época del proceso,: “fulano, mengano, sultana, y tantos otros estaban cerca de los militares porque sus editoriales así lo demuestran hoy”. ¿Y si tenían miedo? ¿Y si estaban amenazados? ¿Y si le temían más a la guerrila armada que a los militares armados? No lo se. (Por eso lo planteo con signos de preguntas)

Dudas…

¿Alguien recuerda el caso de la mucama del Hotel Sofitel? ¿Aquel donde se acusaba al ex director del fmi de violación? Satrauss- kahn, era su nombre y era el candidato presidencial por el partido socialista para el 2012 en Francia. El político mejor colocado de cara a la competencia electoral de mayo de 2012.

Cuando la denuncia se hizo pública estalló un escándalo en los medios de comunicación. Escuche a muchas personas decir “y…estos tipos así, con mucha plata son mounstritos…” (esto además es una generalización…pero de eso hablaremos otro día).
Hace unos días el fiscal Cyrus Vance, quien inició el caso, dijo que no era creíble el testimonio de la mucama y en base a eso un juez de Nueva York lo declaró inocente.

Lo que quiero decir con todos estos ejemplos, sin irme de tema porque es muy fácil, es que intentemos cuando hablamos (un ejercicio que ponemos en practica todos los días) dejarle un espacio a la duda. No todo el tiempo…no se puede vivir dudando de todo pero sí creo que, como espacio de comunicación social, debemos de cuidar nuestras certezas y afirmaciones más aún cuando de se trata de juzgar a una persona a punta de dedo sin pruebas fehacientes más que la simple convicción subjetiva de algo.
Perdónenme pero, aunque suene muy bonito, la convicción subjetiva no es suficiente.

Solo les pido un minuto más antes de que se adentren en este ejemplar (que ya les anticipo que esta de maravilla!). En estos días vi una película llamada “Ágora”, es un drama histórico que se desarrolla en la ciudad de Alejandría, Egipto, a partir del año 391 d. C. La protagonista, interpretada por Rachel Weisz, es la matemática, filósofa y astrónoma Hipatia de Alejandría - que fue supuestamente asesinada, descuartizada e incinerada por los seguidores del obispo y Santo cristiano copto Cirilo de Alejandría en el año-.
En una parte un Cristiano le dice a Hipatia algo así como: “tenes que decidir ahora si crees en Dios o no”, a lo que ella le contesta algo así como: “mi tarea es la de la duda. Soy eso”.
Yo no soy filosofa sino que elegí el periodismo como profesión: acercándome a los hechos con las ganas de saber en una mano y la posibilidad de dudar de lo que me muestran en la otra.