¿Héroes de época?

Puse crossfire (fuego cruzado) de Brandon Flowers y comenzó a sonar una canción llena de dinamismo, que dan ganas de llegar a la meta, uf qué ganas.
Fue en ese mismo momento que empezó a girar por mi cabeza algo que no me dejaba tranquila por varios días: Manuel Belgrano y su película.
El film es interpretado por Pablo Rago y toma el periodo 1812-1820.

Una película que no me muestra un Belgrano héroe sino humano.
Que no me lo muestra prócer sino persona.
Que no me lo muestra idealizado sino en su infierno.
Un Manuel Belgrano, creador de nuestra bandera, que se plantea si volvería a elegir el mismo camino.
Un Manuel Belgrano tozudo como la mula que lo lleva hasta Buenos Aires para que pase sus últimos días.

Una de las partes, para mi la mas dramática de la película, es cuando, consumido por una enfermedad que llevaba años instalada en su cuerpo, se lo llevan en una carreta tapado con una manta y antes de partir besa a su segunda mujer que tiene a su segundo hijo (el primero con ella) en brazos y lanza como un gemido de dolor sabiendo que nunca volvería a verla.
Pero me queda la duda de si fue ella su gran amor, me queda la duda de si los grandes héroes vivían grandes amores, como en las películas, me queda la duda si en el medio del “fuego cruzado” Belgrano andaba colgado de las nueves y con mariposas en la panza pensado en su amada que se quedaba en casita comiéndose las uñas.
Me queda la duda acerca de cuál era la realidad de Belgrano, de San Martín: sus ideas por una patria distinta o el lugar de la lucha con hambre y frío.

Todos los años, en San Isidro, parte una caravana de miles de alumnos que trasladan a pie una gigantesca bandera argentina de más de 80 metros hasta las instalaciones del Colegio Marín. El intendente Gustavo Posse, preside la ceremonia por el "Día de la Bandera" y allí, ante una multitud presente, el jefe comunal toma la promesa a los alumnos de cuarto grado de distintos colegios de San Isidro, quienes realizan una emotiva promesa de lealtad a la Bandera.

En mi caso, recién de grande empecé a conocer más de cerca a los grandes héroes y entender que fueron tan humanos como los humanos mismos.
Entender que la idealización no le hace bien a nadie y empezar a discernir entre “los buenos muchachos”, “los pibes de barrio”, “los luchadores”, “los mujeriegos” y también a “los chantas que canjearon la patria”.
Todos están en los textos escolares, camuflados, algunos otros poco vanagloriados (una lástima)…

Hombres y mujeres de época.
Hombres y mujeres como en todas las épocas.

Foto: (LCdD) Los chicos llevan la bandera argentina de más de 80 metros