Por primera vez, los padres se reunieron para aprender cómo orientar a sus hijos en el uso de Internet

La Fundación Proyecto Padres realizó su 8º Congreso Argentino de Padres y, por primera vez, generó un espacio de reflexión y aprendizaje exclusivamente para padres sobre la temática de las nuevas tecnologías y el impacto que éstas tienen en la vida de sus hijos. Bajo el lema: “Padres, hijos y pantallas: ¿estamos comunicados?”, el evento se llevó a cabo el 18 de septiembre en la Universidad Católica Argentina (U.C.A.) y contó con la presencia de muchísimos padres.

8º Congreso Argentino de Padres - RESUMEN

Durante este año, noticias tales como las rateadas organizadas a través de Facebook y las agresiones virtuales por medio de redes sociales que tuvieron su correlato en la vida “real”, preocuparon a los padres, sobre todo a aquellos que tienen hijos adolescentes. Este panorama se torna aún más preocupante cuando tenemos en cuenta que las herramientas tecnológicas que manejan los hijos y que conducen a estas problemáticas son, en su mayoría, desconocidas por los padres. Es precisamente esta brecha tecnológica/generacional, que distancia a los padres de sus hijos, la que genera una grieta que posibilita la falta de orientación y control sobre el uso que los chicos le dan a Internet. Y fue este el principal motivo que nos movilizó a realizar el 8° Congreso Argentino de Padres, haciendo foco en las nuevas tecnologías y su impacto en la vida de nuestros hijos.

Roberto Igarza fue el encargado de dar comienzo al Congreso a través de su conferencia, la cual llevaba el mismo nombre que el lema del evento. Para este expositor, "la tecnología no es buena o mala, pero tampoco es neutra. Hay que estar involucrados y hacernos cargo de esta ambivalencia". El hacerse cargo implica, para R. Igarza, el estar actualizados: “si los chicos están actualizados, los docentes y los padres también deben estarlo”.

Melania Ottaviano, Mabel Campanelli y Jorge Leiva, profesionales de Fundación Telefónica, hablaron sobre la investigación que está llevando esa entidad en colegios de todo el país, titulada “Generaciones Interactivas en Argentina”.
Alrededor del mediodía, llegó el turno del panel “Relaciones peligrosas: ciberbullying y cibersexo”. Por un lado, Gervasio González Santos y Pablo Basso, ambos profesionales de la Fundación Proyecto Padres, se dedicaron a brindar herramientas técnicas para que los padres sepan qué hacer para orientar la navegación de sus hijos en Internet. Por el otro, Estefanía Santos ofreció recomendaciones y soluciones legales para padres ante los riegos que implica el uso de Internet por parte de los chicos, más aún teniendo en cuenta que estos últimos no son conscientes de los potenciales riesgos a su privacidad que viven en la Web: uso indebido de imágenes y retratos, perfiles falsos, robo de identidad, ciberbullying y stalking, entre otros.

Tras este panel, Mariano Feuer y Fabio Baccaglioni intentaron dar respuesta a la pregunta: redes sociales, ¿antisociales? Ambos expositores coincidieron en que el aislamiento que para los padres genera las redes sociales es una explosión de comunicación para los hijos. Para Fabio Baccaglioni, “la exposición en Internet es parte de la evolución natural que vivimos como seres humanos".

Pedro Panigazzi y Esteban Jurado Traverso presidieron el panel titulado “Los nuevos juegos de nuestros hijos”. Para el primero de ellos, Internet es un juego, tal como lo es la vida. Según, E. J. Traverso, los padres tienen que entender qué es lo que le gusta a sus hijos y utilizar el mismo criterio que usan para la vida para orientar el uso de Internet. “¿El problema es la herramienta o lo que uno permite como padre?”.

A modo de cierre, Adrián Dall’Asta, Director Ejecutivo de la Fundación Proyecto Padres, y Eduardo Cazenave, profesional miembro de la fundación y rector general del colegio San Juan el Precursor, concluyeron que la tecnología efectivamente nos une pero solamente si estamos unidos como personas. “Como padres, no estamos en contra de las tecnologías, pero creemos que debemos incorporarlas sin perder la esencia de lo que es la relación padres-hijos”, sostuvo E. Cazenave.